Para 4-6 porciones
Ingredientes
Merengue
5 claras de huevo
1/2 cucharadita de tremor Tartaro
3/4 taza de azúcar refinada
1y 1/4 taza de azúcar glass cernida
Crema Chantilly
2 tazas de crema para batir
1 cucharadita de vainilla
3 cucharadas de azúcar
Para el Montaje
1 kilo de fresas frescas, lavadas y cortadas a la mitad o en cuadritos
Pétalos de rosa abrillantados.
1 clara de huevo
azúcar refinada
Procedimiento
Precalienta el horno a 100º C
Batir las claras hasta que se tornen espumosas. En ese momento agrega el creemos tártaro y continúa batiendo. Cuando las claras tomen algo de consistencia, comienza a agregar el azúcar refinada poco a poco sin dejar de batir. Cuando hayas logrado unas claras bien montadas, firmes y brillantes, agrega con movimientos envolventes el azúcar glass previamente cernida.
En un mat de silicon o sobre papel encerado dibuja un circulo de aproximadamente 18 cm de diámetro y rellénalo con el merengue. Debe quedar con altura para que podamos rellenarlo con la crema.
Llevar al horno por 1 y 1/2 hora. El merengue debe quedar seco pero no dorado. Se le harán grietas en la superficie ,pero no te preocupes que ese es el encanto de este postre.
Para la crema chantilly solo debes batir todos los ingredientes hasta que forme picos. Recuerda que tanto la crema para batir como las varillas y el envase deben estar fríos para que obtengas resultados mas rápidos. Reserva
Pétalos de rosa abrillantados
Para abrillantar pétalos de rosa, solo debemos batir un poco la clara de huevo, para romper su estructura. Tomar los pétalos uno a uno y sumergirlos en la clara hasta cubrirlos por completo. Luego cubrirlos con azúcar. Recuerda que las flores en los postres deben ser orgánicas o de tu propio jardín. Ya que las comerciales son cultivadas con pesticidas.
Una vez que esté listo tu merengue, déjalo enfriar completamente. Rompe el centro con una cuchara y abre un espacio para colocar la crema batida y las fresas. Decora con mas fresas y con los pétalos de rosas abrillantados. Sirve lo mas pronto posible para conservar la consistencia crujiente del merengue