350g de harina
1 y 1/2 cucharadita de levadura
1/2 cucharadita de azúcar
1 y 1/2 cucharadita de sal
30 ml de agua tibia
125ml de leche
1 huevo
50g de mantequilla derretida
Procedimiento
Reserva de los 350 g de harina, 30gr.
Mezcla los 320 g restantes con la levadura y el azúcar .
Incorpora el huevo y la mantequilla derretida. Añade el agua y la leche poco a poco y por ultimo la sal. Mezcla con el gancho amasador de la batidora, lentamente hasta que todos los ingredientes estén incorporados. Sube un poco la velocidad y comienza a amasar hasta que la masa se despegue de las paredes del bol y se pegue totalmente al gancho. Si notas que la masa esta muy floja puedes hacer uso de los 30 g de harina que reservaste al principio, agregando de a poco.
Retira el gancho amasador y deja la masa dentro del envase reposando durante 1 hora hasta que haya doblado su volumen. (debes tapar la cubierta del envase con un pañito)
Una vez pasado este tiempo, colocar la masa sobre una mesada con un poquito de harina y desgasificarla amasando muy poco. Solo lo necesario para sacarle el gas.
Divide la masa en 12 porciones iguales. Con la palma de la mano hueca bolea las porciones hasta obtener unas bolitas lisas y compactas.
Coloca las bolitas separadas unas de otras en el molde de hornear y cubre con papel film. Deja reposar hasta que las bolitas doblen su tamaño y se hayan pegado entre si.
Precalienta el horno a 200º C.
Cuando el horno haya alcanzado la temperatura señalada, quita el papel film sacude agua sobre las bolitas y sobre las paredes del horno, para hacer una cámara de vapor, cierra la puerta del horno rápidamente y hornea entre 20 y 25 minutos o hasta que estén ligeramente dorados.
Estos panecillos son perfectos para el desayuno o la merienda ya que combinan perfectamente con rellenos dulces y salados